Cómo conservar el jengibre
Si tenemos jengibre fresco en nuestra casa y no lo consumimos con frecuencia, nos arriesgamos a que se estropee rápidamente. Así que aquí encontrarás algunos trucos para mantenerlo más tiempo y no desperdiciar ni una sola pieza.
Aunque no es parte de nuestra tradición culinaria, el jengibre está cada vez más presente en nuestros hogares tanto para dar sabor a los alimentos como para preparar tés de hierbas u otros remedios naturales basados en esta especia.
Comprarlo de buena calidad, preferiblemente orgánico y lo más fresco posible, es importante no solo porque nos aseguramos de que todas sus propiedades se mantengan intactas, ya que se encuentran dentro del rizoma, sino también porque de esta manera durará más tiempo.
Si no lo usas muy a menudo existe el riesgo de que el jengibre se deteriore lentamente, se seque y no se pueda utilizar. Así que cuando compres jengibre asegúrate de que tenga la piel lisa y de que los rizomas sean firmes y consistentes. Evita las piezas que tengan una piel arrugada, ya que probablemente no sean del todo frescas.
Éstos son 5 sencillos métodos para conservar el jengibre, rallado o entero, durante más tiempo:
En una bolsa de papel
Una manera de evitar que el jengibre se seque demasiado rápido es guardarlo en una servilleta o bolsa de papel. Se recomienda envolver el trozo de jengibre de forma que no haya espacio para que pase el aire y la humedad. Una vez envuelto, debe conservarse en un lugar fresco y seco (si las temperaturas lo permiten).
En el frigorífico
Puedes prolongar la vida del jengibre poniéndolo en el frigorífico, para ello es aconsejable dejar intacto todo el rizoma y retirar los trozos solo cuando sea necesario. En este caso también es bueno poner el jengibre en una bolsa de papel que se pueda volver a cerrar, quitando tanto como sea posible el aire de su interior y colocándolo en el cajón de las frutas y verduras. Esto mantendrá el jengibre fresco durante varias semanas (aproximadamente un mes).
En el congelador
Una de las mejores maneras de conserver el jengibre es pelarlo y picarlo finamente, ponerlo en un recipiente con tapa y meterlo en el congelador. Otra opción es utilizar bolsas para almacenar alimentos que se puedan cerrar herméticamente, de forma que se pueda cortar en rodajas, enjuagar, picar o rallar en porciones individuales. El jengibre congelado se puede almacenar durante en un par de meses sin perder su sabor.
En un frasco con licor o un líquido ácido
También puedes conservar el jengibre recién pelado sumergiéndolo en un líquido ácido como el zumo de limón o el vinagre.
Aunque puede parecer extraño, otra de las maneras más efectivas de preservar el jengibre es ponerlo en algún licor. El alcohol, de hecho, ayuda a mantener intactas las propiedades nutricionales del jengibre, sin alterar significativamente su sabor, aunque esto dependerá del tipo de licor que utilicemos para su conservación.
¿Qué licores son los más adecuados para conservar el jengibre? Especialmente el vodka, que no alterará demasiado el sabor del rizoma, y también el jerez.
En cualquier caso, es un método de conservación agresivo que puede llegar a alterar el sabor del jengibre.
En aceite
Con el rizoma recién rallado se puede hacer un excelente aceite de jengibre que durará mucho tiempo. Se elabora con sólo dos ingredientes: aceite de oliva virgen extra y jengibre. Una vez el aceite se haya impregnado de todo su aroma, puedes decidir no filtrarlo y utilizar los trozos de jengibre para enriquecer tus platos.
Algunos consejos
Después de pelar y cortar el jengibre, ya no es posible almacenarlo a temperatura ambiente. Para que dure más tiempo, tendrás que congelarlo o guardarlo en la nevera.
El jengibre dura fácilmente hasta 3 o 4 semanas en el refrigerador, siempre y cuando no haya sido expuesto al aire y a la humedad.
La manera más fácil de tener siempre disponible jengibre fresco es cultivarlo tú mismo en casa. Intentarlo no cuesta mucho.
Ahora que sabes cómo preservar el mejor jengibre, ya no tienes excusa para desperdiciarlo y poder aprovechar cada día los muchos beneficios que ofrece.